Por JOSE BRECHNER
Estoy entre aquellos de los que habitualmente se quejan del pésimo servicio de las empresas de telecomunicaciones latinoamericanas, porque paso mucho tiempo frente a mi computadora a quien aprecio cariñosamente, pues es mi secretaria, mi mensajero, mis amigos, mi teléfono, mi concierto, mi película, y hasta mi fantasía sexual.
Ocurre que pensaba que el peor servicio de internet del mundo lo daban las compañías privadas argentinas, hasta que me tocó usar los servicios de la estatal monopólica boliviana. Como en todo aquello donde el estado es el proveedor, y para desgracia el único, no es de extrañar que el servicio sea pésimo, además de caro.
Para mi sorpresa, los usuarios de América Latina no habíamos sido los únicos timados, los europeos no están mejor.
Ocurre que un estudio realizado por una comisión europea para medir el ancho de banda en el continente, ha revelado que algunos clientes reciben menos de la mitad de lo que los proveedores publicitan en sus paquetes.
El reporte cuya primera fase de medición fue efectuada por SamKnows mostró que los europeos reciben un promedio del 74% de lo que están pagando. Si tienes un paquete de 100 Mbps recibes descargas de 74 Mbps lo cual es relativamente decente comparado con lo que pagas y recibes en Latinoamérica, donde nadie ofrece 100 Megas, pero te cobran como si fuese así.
La media latinoamericana es de 6 Mbps (seis #*@¡) y con suerte te llega la mitad de la velocidad. La comparación más simple para comprender este robo, se puede graficar con la de un individuo que entra a una tienda de ropa, paga por 10 camisas y sólo le entregan cinco.
A cualquiera que le suceda algo semejante llama a la policía, a la renta, y arma un escándalo mayúsculo. Sin embargo, la mayoría de la gente en Latinoamérica está tan acostumbrada a que la estafen, especialmente si el estafador es el propio gobierno, que nadie dice nada.
La comisión europea explicó que la velocidad media a través de Europa es de 19,47 Mbps durante las horas pico, pero que la mezcla de tecnologías empleadas esconden los verdaderos resultados de los tests.
La conectividad por cable y FTTx dieron los mejores resultados, otorgando respectivamente 91,4% y 84,4% de las velocidades publicitadas. El reporte indicó que si bien las conexiones por fibra ofrecen velocidades mayores, eran menos confiables que las por cable.
Entre los aspectos más atractivos que establece la Agenda Digital del Comisionado para Europa, se programa un acceso a internet de todos los hogares europeos para 2020, con una velocidad mínima de 30 Mbps y 50% de éstos tendrán una velocidad de 100 Mbps o más.
En el Reino Unido, la Autoridad para los Estándares de Publicidad (ASA en inglés) y el Comité para la Práctica de la Publicidad (CAP) introdujeron nuevos delineamientos para la propaganda de velocidad de banda ancha que indican que por lo menos 10% de los usuarios deben recibir la velocidad promocionada y resaltar que muchos no recibirán la ofertada.
El estudio realizado apunta a optimizar la transparencia del mercado de banda ancha otorgándoles a los consumidores mejor información acerca de cuánto pagan y qué reciben a cambio.
Obviamente en América Latina, los cleptómanos gubernamentales y privados no se ajustan a ninguna ley ni escrutinio público y siguen embaucando a los ingenuos habitantes de las primitivas tierras del sur de América, cuya gran mayoría no tiene la más remota idea de qué es a lo que me refiero en este artículo.
http://josebrechner.com
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